En este último miércoles de mayo el grupo senderista se ha reducido, por cuestiones personales y ajenas, a sólo dos personas; Pedro y yo.
No obstante nosotros hemos hecho la caminata de rigor. Nos hemos dirigido al término municipal de Santa Pola, concretamente a la carretera que accede a Gran Alacant desde la N-332. A los 2 kms (+/-) he dejado el coche en un claro de la pista que discurre en paralelo y, desde este punto, hemos comenzado nuestro recorrido por la Sierra de Santa Pola.
Tomamos la pista y después el desvío que nos conduce hasta el Barranc del Salt y la Cova que lleva el mismo nombre.
Desde el barranco nos dirigimos, por PR, al Aljub del Salt.
Aquí encontramos las ruinas de una pequeña casa y el Aljub en cuestión.
Ahora, por pistas, sendas y caminos, tomamos dirección sur para llegar al Barranco de Paco el Mañaco, antes cruzamos la carretera que se dirige al faro.
Llegamos ahora a la gran pista que viene desde Santa Pola y nos deja prácticamente en el mismo vértice geodésico.
Las ya típicas fotos en el vértice.
Este vértice está sobre un bunker y muy cerca de unos nidos de ametralladoras construidos como defensa en la guerra civil española.
Dejamos atrás estas construcciones militares y caminamos en dirección este, hacia el mar.
Allí está el faro de Santa Pola, las pasarelas/mirador, el mar y… nuestra Isla de Tabarca.
Hoy, desde luego, lucía perfecta con ese cielo tan espectacular y el increíble Mediterráneo.
Un buen rato de descanso y disfrute con tanta belleza y comenzamos la vuelta al coche.
Unos pocos kilómetros después, por pistas y caminos, llegamos hasta el vehículo.
Regreso a Alicante.
Valoración: 2**
Recomendable: Sí, claro. Es una ruta nada complicada, de unos 13 kilómetros, con un desnivel mínimo (108 mts.) y con muy pocos puntos de interés pero… las vistas del mar, la isla y toda la bahía de Alicante hacen de esta caminata su gran atractivo.
