Para este espectacular sábado de primavera la ruta elegida ha sido la que comienza en pleno puerto de Albaida, entrados ya en la provincia de Valencia, donde hemos realizado una caminata que nos ha llevado por la umbría de la Sierra de Benicadell, visitando algunos de sus puntos de interés.
En esta ocasión hemos caminado Encarna, Vicente y yo. Hemos dejado el auto en el área de servicio que hay en pleno puerto de Albaida. Desde aquí hemos tomado la senda que conduce en suave ascenso hasta la Font de Fontanares. Aquí, donde el sendero se bifurca, cogemos el que discurre a mano derecha y nos lleva hasta el Pou de Neu de Carcaixent y la Casa de Don Miguel.
Llegados a este punto, decidimos hacer la ruta un poco más larga. Subimos la pista que nos conduce hasta el Alto del Morral, divisando desde la misma la segunda Cava de Carcaixent.
Aquí, en el Alto, tomamos la estrecha senda que desciende zigzagueando hasta la pista; ahora sí por la propia umbría de la sierra, entre carrascas y madreselvas.
Desde aquí, a pesar de la neblina, las vistas de la Vall d’Albaida y algunos de sus pueblos son impresionantes.
En la Casa de la Xamorra, situada en la misma pista forestal, tomamos dirección oeste, hacia la Font Freda. Algunos kilómetros después nos encontramos con esta fuente y su pequeña pero agradecida zona de recreo, con bancos para el relax.
Aquí nos tomamos un pequeño descanso para refrescarnos y comer algo.
Seguimos. Una pequeña subida para encontrarnos con la cruz que preside el valle. Un símbolo que recuerda la muerte de un joven, parece ser, amante de la montaña.
Seguimos la pista, llegamos ahora al Corral de Diego, prácticamente sólo quedan algunas piedras y trozos de muro, y a los pocos metros la Cava de Diego, otro de los pozos de nieve de esta sierra.
Tan sólo nos queda ya tomar el sendero que nos conduce hasta la Font de Fontanares y al camino, el mismo de la ida, que nos lleva al parking y al coche.
Regreso a Alicante.
Valoración: 3***
Recomendable: De todas, todas. La ruta tenía originalmente 12,150 kilómetros pero con un pequeño error/despiste se le han añadido casi 2 km. más, un desnivel de unos 620 mts. y hecha a un ritmo bastante tranquilo. Una caminata donde hemos disfrutado del paisaje, de la naturaleza que rebosa en primavera, de un día ideal y una compañía de ensueño. Totalmente recomendable.