El primer mes del año está dando sus últimos coletazos. Hoy ha amanecido un día espectacular, con un viento algo frío pero con un cielo bastante despejado y muy luminoso, y yo me he animado a hacer una caminata.
Mi elección ha sido la Sierra del Benicadell. Una ruta muchas veces realizada, la que comienza en pleno puerto de Albaida, en la provincia de Valencia, y que discurre por caminos, pistas y senderos del margen norte, y valenciano, de esta sierra.
El primer tramo, en ascenso, me acerca hasta la bifurcación de la Font de Fontanares. Tomo la senda de la derecha y continúo en suave ascenso hasta llegar a la Cava de Carcaixent y, a pocos metros, la Casa de Don Miguel.
Desde aquí arriba las vistas son espectaculares y las sierras de los alrededores aún tienen en sus caras norte restos de la últimas nieves.
Ahora la pista desciende cómodamente durante unos dos kilómetros para llegar al cruce de caminos donde se encuentra el Corral de Don Diego, una construcción prácticamente en ruinas.
Hay que decir que durante todo el recorrido se ha notado la limpieza que han efectuado los equipos pertinentes, podando árboles y recortando los márgenes de los caminos en prevención de posibles incendios.
Elijo la senda de la derecha que me llevará hasta el área recreativa de la Font Freda y al Mirador, pasando por La Cruz, elemento construido a la memoria de un joven de la zona.
Desde este punto las vistas de la inmensa Vall d’Albaida son impresionantes, con todos sus pueblos, sus sierras que la forman y el Embalse de Bellús que está a tope de agua.
Desde la Font vuelvo sobre mis pasos para volver al Corral de Don Diego y a su Cava de Neu. Ahora, en este cruce, tomo la senda que me acerca a la Font de Fontanares y al camino que me conduce al coche.
Regreso a Alicante.
Valoración: 3***
Recomendable: Sin duda. Esta es una de las rutas que más disfruto. Han sido cerca de 10 kilómetros, con un desnivel de 350 mts. y todo ello hecho en un tiempo más que aceptable.