Esta ruta en Wikiloc (La que finalmente se ha hecho).
Esta ruta en Wikiloc (La que se tendría que haber hecho).
La mañana ha comenzado amenazante, nubes, bruma, etc… Pero, finalmente, a medida que llegábamos a la población de Benilloba, inicio de nuestra ruta, el día se ha tornado luminoso y con muy buena temperatura.
A la entrada del pueblo hemos aparcado el coche y, Fuen, Pauli, Carol y yo, hemos iniciado nuestro recorrido por los alrededores de este municipio, a fin de visitar algunos puntos de interés.
Nos dirigimos hacia el sur, por pista, carretera y senda, cruzando el río y rodeando la llamada Costera de Penáguila, con una vegetación frondosa y otoñal, una explosión de llamativos colores.
Aquí tomamos la pista, en descenso, que nos lleva al río Penáguila por el Barranc de Cuixot. Alguna casa diseminada por los alrededores con sus campos de cultivo.
Estas chicas, sobre todo Fuen, en cuanto encuentran algún vegetal con frutos… se vuelven unas locas ladronzuelas, jejeje
Llegamos hasta el río y aquí hacemos nuestro primer cruce.
En un punto determinado de la senda nos tropezamos con el acueducto. Cruzamos de nuevo el río sobre esta construcción y nos dirigimos, por senda casi imperceptible, en dirección norte con la intención de llegar al pueblo.
Vuelta a tropezarnos con frutales y las muchachas saqueadoras se ponen locas de contentas, jajaja.
Nuevamente, otro cruce de río.
A partir de aquí la vegetación es tan frondosa que perdemos la senda de vista. Tenemos que preguntar a un campesino que encontramos en la zona, nos da unas cuantas indicaciones, las malinterpretamos o no ha sabido darlas correctamente. Damos tumbos de aquí para allá, vamos y volvemos unas cuantas veces por caminos equivocados.
Finalmente, y guiándonos por nuestro sentido de la orientación, pasamos por unos cuantos campos de cultivo hasta llegar a la carretera.
Aquí ya no hay pérdida posible. Llegamos hasta Benilloba, caminamos por sus calles y nos vamos al otro lado del pueblo, en dirección a la Senda de los Molinos.
Por asfalto llegamos a este paraje, la Senda de los Molinos.
Hacemos una parada en una de sus áreas recreativas para refrescarnos.
Fuen aprovecha la parada para hacernos una pequeña demostración de los que esconde en la mochila (Dios mío, se ha llevado medio monte, jejeje)
La senda nos lleva hasta el río Penáguila, sus puentes, sus pozas y hasta el Molí del Salt.
Llegados a este lugar, con un especial encanto, volvemos sobre nuestros pasos y nos volvemos hacia Benilloba.
En este último punto de la ruta hay un strong moment. Hay tiempo para todo, jajaja
Llegamos al pueblo y al coche. Regreso a Alicante.
Valoración: 3***
Recomendable: Por supuesto. Ha sido una caminata muy variada, hasta las equivocaciones le han dado un toque de aventura a la ruta. Al final han sido cerca de 10 kilómetros, con un desnivel de 300 metros y, a pesar de todo, hechos en muy buen tiempo. Muchos puntos interesantes y… lo mejor de todo, la compañía.