Sierra de Santa Pola, en Wikiloc.
Hoy también ha sido un día ventoso, frío, feucho y desapacible, y yo, que no me he querido calentar mucho la cabeza, he decidido hacer una caminata nada complicada y bastante cercana.
Hasta el depósito de agua que hay cerca de las Casas de Meleja, en plena Sierra de Santa Pola, me he dirigido para dejar el coche y realizar un recorrido por algunos de los senderos que la recorren.
He tomado, durante 1’2 kilómetros, la pista que se dirige al faro y, después, me he desviado a la derecha en dirección al Paratje de la Fulla Rotja, una gran vaguada con campos de cultivo.
Desde ahí, y a través de veredas y sendas, he caminado entre el Camí de la Torre y el Barranc del Bon Mosso, llegando a la pista que conduce a la Torre de les Escaletes.
Esta es una de las muchas torres vigías de la costa alicantina, en concreto la Torre de Escaletes prestaba máxima vigilancia a las posibles intrusiones piratas que pudieran haber en la Isla de Tabarca.
Después de visitar este punto de interés de mi recorrido, me dirijo, por pista, hacia las antenas, llamado Camí de Sant Pere.
En la base de estas antenas se encuentra este original y colorido graffiti.
Tomo ahora un sendero muy bien señalizado y de fácil acceso, llamado ‘Senda de Roberto’.
Esta senda me lleva a un gran monolito erigido por su hermano en memoria de Roberto Castro.
La senda me lleva al camí de la Torre y enlaza con el del Faro. Aquí, a pocos metros, se encuentra el vértice de la sierra, Santa Pola, 147 m.s.n.m.
Desde este punto se da paso a las plataformas de cañones antiaéreos y al final del cabo, con sus pasarelas y sus vistas panorámicas de la costa alicantina.
El mar, la isla de Tabarca, la costa alicantina, el faro, etc… Todo ello hace de esta zona un punto de máximo interés.
Comienzo el regreso al coche, pasando por la carretera del faro hasta uno de los desvíos, a mano izquierda, que me lleva, pasando por las ruinas de la Casa de la Pinada, hasta la pista de inicio, el depósito de agua y el auto.
Regreso a casa.
Valoración: 2**
Recomendable. Totalmente. Han sido 12 sencillos kilómetros, con un desnivel mínimo y unas vistas de lujo.