Iniciamos las caminatas del mes de junio desde el municipio de Atzeneta d’Albaida, localidad valenciana perteneciente a la comarca de la Vall d’Albaida.
Pedro, Jesús, Raúl, Reme y yo, hemos aparcado el coche en el mismo pueblo para comenzar un recorrido por sus calles y efectuar la ruta de los lavaderos, pasando por la Ermita del Santísimo Cristo de la Fe, por la avenida de la Acequia del Puerto (en la que se encuentran la gran mayoría de lavaderos), el Ayuntamiento, el Museo de las Artesanías, el Llavaor public d’Atnezeta, la Real Parroquia de Sant Joan Baptista, la Font dels 21 Xorros,… entre otros lugares de interés.
Abandonamos esta ruta urbana dirigiéndonos, hacia el sureste, por el Carrer dels Pastors y tomando la pista/senda que nos lleva, en ascenso, por la ladera noroeste de la serranía, de lleno ya en el Paisaje Protegido de la Umbría del Benicadell.
Aproximadamente a un kilómetro de subida encontramos la Font de l’Arrier y a otro kilómetro más, la siguiente, la Font de l’Anoueret.
Pocos metros después conectamos con una pista importante, coincidente, en un buen tramo, con el Camino de Santiago del Sureste.
Llegamos, en dirección este, a las ruinas del Mas del Pla de Roda y su fuente homónima (difícil de localizar por la maleza que la envuelve).
Con todo el dolor del corazón, hay que decir que estas tres últimas fuentes, con tanta sequía, no tienen agua.
En este punto retrocedemos y seguimos por la pista Camino de Santiago del Sureste, ahora en dirección oeste, hasta (+/-) el km 7’8. Continuaremos, hacia el sur, unos 400 metros, por trocha y en acusado descenso .
Aquí abandonamos el Camino de Santiago y nos incorporamos a otra pista que nos lleva, hacia el noroeste, en paralelo a la autovía A7 hasta pasar por debajo de ella y encontrarnos con el nacimiento del Río Albaida.
Seguimos la senda paralela de la acequia del río hasta llegar a las ruinas del Monasterio de Santa Ana, el Molino de d’Alt y la Casa Molino Martínez, con su salto de agua.
Ahora, la senda/pista, por momentos ascendente y en dirección este/noreste, nos llevará hasta el pueblo, pasando antes por la Font de Sant Lluis (también seca) y el albergue municipal El Regit.
Estamos ya a las puertas de Atzeneta d’Albaida y, a los pocos metros, cerca del auto.
Regresamos a Alicante.
Valoración: 3***
Recomendable: Por supuesto, de todas, todas. Han sido cerca de 12 kilómetros en total, con un desnivel de unos 320 metros. Dos caminatas unidas, una urbana y la otra senderista, que han hecho que el recorrido haya estado lleno de puntos de interés. Todo en una mañana calurosa, aunque agradable, y una compañía de 10.